El director de Estudios de l´Ecole des Hautes Etudes en Sciences Sociales de Paris, Roger Chartier ha clausurado esta tarde, en el Aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letras, el ciclo "La memoria de Europa en un mundo global" que ha venido desarrollando durante los últimos meses el Aula de Religión y Humanismo de la Universidad de Córdoba. El tema de su conferencia fue " Literatura, historia y memoria en los siglos XVI y XVII. Las "histories" de Shakespeare y las parodias del Quijote"
Chartier, que desarrolló su intervención en español, analizó brevemente el papel que juega la Historia de la Literatura en la construcción de las identidades culturales y las diversas formas de hacer del pasado algo contemporáneo o conectarlo con los presentes históricos; así la construcción del pasado a través de las obras literarias, su presencia, a través de ellas, en momentos del presente o la representación que de ese pasado se lleva a cabo a través de un saber histórico. Para ello utilizó, junto a otros, conceptos como el de energía social a la hora de abordar cuestiones relativas a las representaciones colectivas del pasado.En este sentido dicha energía sería la capacidad de las obras literarias para transformar las experiencias de lectores y espectadores dando lugar a otras nuevas. O, dicho de otra manera, la energía del mundo social presente en la obra volvería al mundo social del lector generando nuevas inquietudes, pero también transformando su visión del pasado.
Chartier ejemplificó su exposición a través de la reclasificación realizada en su día de las obras de Shakespeare en comedias, tragedias y obras históricas, en la que una serie de ellas pasaron de ser consideradas de una manera a integrarse en otra categoría - de forma que las históricas vienen casi a configurarse como una historia de los reyes de Inglaterra- , para luego analizar cómo se tratan o se reinterpretan narrativamente algunos de los hechos recogidos en ellas en función de la circunstancia social y cultural de la época. "Cuando la Historia se transforma en Literatura - apuntó- el reto es entender lo que fue entendido en su día a través de estas representaciones".
El ensayista francés, reflexionó también sobre el papel de la Historia de la Literatura dentro de las mismas obras literarias, como otra presencia del pasado en el presente. Como ejemplo del conocimiento de prácticas estéticas del pasado que se reciclan y renuevan para hacer surgir otras nuevas, Chartier se refirió al uso y la parodia que se hacen en el Quijote de la novela de caballerías, la pastoril o la picaresca " para construir una contemporaneidad sobre el pasado y una nueva forma de escribir más allá del estilo utilizado en estos géneros".
La oposición entre la construcción del saber histórico y la memoria centró el último análisis del conferenciante, en cuanto que el análisis histórico supone una construcción explicativa y la memoria hace referencia al recuerdo vivo, al conocimiento presencial. La una interpreta y la otra reconoce. Por ello la Historia es una disciplina del conocimiento diferenciada de la memoria. Para finalizar se refirió al hecho de que si la Literatura se apodera de la Historia también lo hace de los criterios, métodos y conceptos historiográficos hasta construir obras de ficción basadas en ellos como es el caso de la novela de Max Aub " Jusep Torres Campalans", una biografia imaginaria que crea incertidumbre porque aplica las técnicas que habitualmente usan los especialistas para llegar al fondo de la realidad histórica.
El acto estuvo presidido por el vicerrector de Profesorado, José Naranjo, presentando al conferenciante la directora del Aula de Religión y Humanismo, Maria Dolores Muñoz quien en su intervención resumió también brevemente las principales aportaciones del ciclo.